Rollitos de Canela suecos (Kanelbullar)

Elaboración

• Ponemos en un bol los ingredientes secos de la masa, (el harina, la levadura fresca desmenuzada y el azúcar) y agregamos el huevo, la leche y la mantequilla fundida (todos estos a temperatura ambiente).
  *Conviene no agregar desde el principio los 500 gramos de harina, por si se requiere añadir harina progresivamente al tomar cuerpo la masa.
• Se mezclan los ingredientes, y amasamos hasta lograr una masa elástica y homogénea. Formamos una bola, y dejamos levar media hora tapada con un paño en un lugar cálido.
• Después, se extiende la masa con el rodillo hasta que tenga unos 5 mm de espesor, formando un rectángulo de unos 50 cm de largo por 20-25 cm de ancho.
• Para hacer el relleno, sacamos la mantequilla de la nevera para que esté a temperatura ambiente y sea fácil de manejar. Entonces, se unta la mantequilla sobre la masa. Luego se espolvorea el azúcar moreno (o en su defecto azúcar blanquilla) sobre la masa y lo mismo con la canela, que quede bien esparcida sobre la masa.
• Una vez hecho esto, se procede a enrollar la masa a lo largo, quedando un rollo de unos 50cm de largo.
• Se corta el rollo en rodajas de unos 2-3 cm.
• Se colocan las rodajas en la bandeja del horno, sobre papel para hornear, con la superficie de corte hacia arriba.
• Antes de hornear, se deja que suba la masa de nuevo durante unos 60 minutos, o hasta que los bollos lleguen a doblar su tamaño. Este es el levado final.
• Para dar brillo a la superficie del bollo, se baten juntos la yema del huevo y las cucharadas de leche, y con ayuda de una brocha de cocina, pincelamos la superficie de los bollos con esa mezcla, para que queden dorados cuando se horneen.
• Tras la hora de espera del levado final, se hornean los bollos durante 18-20 minutos a 180°C.
• Una vez estén dorados, se retiran del horno, se dejan enfriar, y cuando lo hayan hecho se espolvorea su superficie con azúcar glass